Philippe Starck

Hijo de un fabricante de aviones, Philippe Starck nació en París en 1949. A los veinte años fue el director artístico de Cardin, a los veinticinco viajó por todo el mundo y se instaló en USA, a los veintisiete volvió a París y diseñó el primer gran night club “hard”: La Main Bleue. Le siguen otros clubes, cafés, restaurantes, almacenes, hoteles, los salones de Pierre Balmain y el apartamento de François Mitterrand en el Elíseo. Diseña una colección de muebles para el Ministerio de Cultura francés, crea el Royalton Hotel en Nueva York, el Téatriz en Madrid, el Paramnount Hotel en Nueva York, el Baron Vert, un edificio aún más espectacular en Osaka, construye dos grandes palacios en Japón, Nani Nani y Asahi, gana el concurso de la Ecole Nationale des Arts Décoratifs de París, prepara el nuevo Téatriz en México, un nuevo hotel en Miami y muchos otros proyectos en todo el mundo. Pero también encuentra tiempo para dibujar pasta, botes, ceniceros, lámparas, cepillos de dientes, mangos, exprimidores, cubiertos, relojes, patinetes, oficinas, camas, termos, juguetes, baños, televisores, radios... en fin, todo lo es posible imaginar. Los museos se disputan sus obras, sobre las que llueven los premios y reconocimientos más prestigiosos. Starck lleva a todos con él en su camino, pocos pueden resistir sus inteligentes provocaciones. La colaboración con Cassina comenzó en la década de 1990 y dio como resultado productos verdaderamente innovadores con desarrollos tipológicos sorprendentes.

Philippe Starck